martes, 12 de julio de 2011

DECLARACIÓN DEL FRENTE TECNOLÓGICO

El sábado pasado 2/7 participamos del lanzamiento del Frente Tecnológico (FRETEC).

El FRETEC (de cuya génesis participó nuestra agrupación, Unidad Estudiantil) es un frente conformado por todos los claustros de la UTN FRA para discutir política en la Facultad, y desde donde apoyar al Proyecto Nacional en forma crítica: comprometiéndonos a defender lo que se ha hecho bien pero también determinando lo que aún falta.

En este encuentro participaron 100 personas, entre autoridades, docentes, graduados, no docentes y estudiantes.

El CEIT expresó una postura acerca de por qué creemos necesario discutir política en la Facultad.



A continuación les acercamos el documento que salió como declaración del FRETEC ese mismo día.



En los últimos años se ha incrementado de manera considerable el debate político en nuestra sociedad. Por esa razón, resulta de vital importancia escuchar diversas argumentaciones evitando dogmatismos y prenociones. No se trata de etiquetar a las personas, o a las organizaciones, ni de encuadrarlas en moldes ajustables a nuestras visiones. Tampoco se trata de crear polarizaciones que sólo contribuyen a desalentar la participación, obstaculizando la libre expresión. La defensa de la democracia implica la construcción de un espacio que represente a los diversos sectores sociales, contemplando sus características individuales

Hoy después de tanto tiempo, nos encontramos en un contexto de país nuevamente politizado, en el que han cambiado varias cosas desde los 90’ y en este contexto resulta lógico, que los grupos dominantes intenten mantener sus beneficios, obtenidos por vías nunca esclarecidas, por todos los medios que estén a su alcance: incluso con mentiras, acusaciones y descalificaciones tales como cuestionar la vestimenta o el luto o antenponer “los modales” por delante de la defensa del país.

Es indudable que estos grupos son los mismos que en el 76 y en los 90 pusieron en marcha este esquema impositivo regresivo que castiga a los más pobres y premia a los poderosos, imponiendo la flexibilización y avasallando los derechos laborales. Además son artífices de la expoliación de los recursos naturales y el patrimonio estatal que es propiedad de la sociedad en su conjunto. Resulta imposible comprender cómo lo hicieron, si no asumimos la anuencia de poderosos medios de comunicación que justificaron o ampararon estas acciones con un silencio muy parecido a la complicidad.

En este contexto el campo popular, del que nos sentimos parte, ve con buenos ojos la finalización de los negociados que se llevaron a cabo con las AFJP. O los controles realizados por la AFIP y el Ministerio de Trabajo en el sector rural, que condujeron a la detección de condiciones de explotación para los peones rurales que ha sido un secreto a voces durante mucho tiempo. Podemos seguir describiendo medidas favorables como la implementación de la asignación universal por hijo, que tiene una organización que permite eliminar algunos vicios de la política partidaria, justamente por su carácter universal. ¿Cómo no considerar auspicioso que vuelvan a abrirse las industrias, que el empleo en blanco crezca, que se abran las paritarias; que se invierta en la universidad pública, que los científicos regresen del exterior? Y cómo, después de describir el contexto nacional auspicioso, no tener esperanzas cuando en semejante crisis del capitalismo global nuestra economía muestra signos de fortaleza, y además se logra implementar una política de educación que acerca la tecnología a los excluidos y una política de derechos humanos fundamental para reconstituir el principio de justicia.

Son ejemplos de estos cambios el sustancial incremento de inversión en la educación técnica y la promulgación de la Ley de Educación Técnico Profesional que luego de haber perdido el CONET en los noventa, nos devuelve la escuela técnica en el 2005 , la notable cantidad de investigadores del CONICET y la vuelta a su país de origen de más de 800 investigadores que residían en el exterior, que produjeron avances en satélites, radares, buques, autos, vehículos especiales, centrales eléctricas (convencionales, nucleares y represas), innovación en nanotecnología, tecnología de las comunicaciones, células madre, tratamientos médicos de avanzada, y muchos campos más de la investigación científica.

Las políticas inclusivas en educación produjeron la creación de nuevas universidades nacionales entre las que se incluye la UNDAV, que con orgullo dirige un graduado de la FRA.

Desde nuestra U.T.N. Facultad Regional Avellaneda interactuamos con los programas sociales y de la producción del municipio de Avellaneda, implementadas por el actual intendente, Ing. Jorge Ferraresi, egresado de nuestra facultad, así como con la industria local, lo que nos ha permitido una inserción en el medio productivo cada vez más intensa.

En palabras de la presidenta “cambiamos el paradigma porque hemos comenzado a vincular en los hechos, en la práctica, con recursos, con resultados, a la ciencia con el crecimiento económico y con el desarrollo de la industrialización de nuestro país”

El cambio de paradigma implica también no solo la recuperación de los que estaban en el exterior sino también la inclusión de estudiantes a las universidades, con políticas de beca y apoyo a las carreras prioritarias, que son las que producen los graduados que nuestro país necesita y entre las que se cuentan nuestras especialidades. Por eso es necesario que las facultades de ingeniería produzcan más graduados y del más alto nivel. Y que la industria y el estado los contengan brindando espacio para investigar y trabajar.

Con el mismo espíritu crítico que enfrentamos en los noventa a los que llevaron a la crisis del 2001, con ese mismo espíritu crítico, hoy creemos que es necesario apoyar el modelo que encabeza Cristina Fernández de Kirchner. Apostando al diálogo, la construcción, evitando caer en discursos demagógicos y apegándonos a lo que creíamos correcto: ser honestos para ser dignos. Nuestro compromiso es el de siempre, es con los que trabajan día a día por una Argentina más justa y solidaria, nunca con el enriquecimiento de unos pocos.

Como profesionales graduados, docentes, estudiantes, y trabajadores vinculados a la ingeniería, no podemos menos que desear fervientemente el desarrollo industrial del país, máxime teniendo plena conciencia que sólo de esta forma es posible sostener una sociedad inclusiva. Decimos esto, a la vez que afirmamos que, en el mundo de hoy, el desarrollo industrial requiere una planificación seria, respetando la naturaleza y fomentando un consumo responsable. Es por esto que, en nuestra opinión, una sociedad mejor sólo puede lograrse mediante un desarrollo económico sustentable que genere industrias y cuide a su vez la protección del medioambiente y, en el campo de la cultura y la educación permitiendo el pleno debate y el acceso gratuito a la educación en todos sus niveles, siendo los trabajadores protagonistas fundamentales de todo este proceso

Por todo lo expresado anteriormente, consideramos necesario seguir acompañando este proyecto en el que convergen nuestros ideales y nuestra historia de trabajo en la educación universitaria, apostando a una patria justa, libre y soberana integrada a Sudamérica. Y, como dijo un luchador, con alegría, porque “nada grande se puede hacer con tristeza”

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sinceramente, yo no coincido en que se hable de política en la facultad. No concibo ver en el Centro de Estudiantes fotos del Che Guevara, Madres de Plaza de mayo y demás vinculados con la política.

Si hay algo que hacía diferente a la UTN de todas las facultades del país era la ausencia de temas políticos. No me gustaba cuando iba a la UBA a buscar a mis amigos y en 20metros de pasillo me repartían 40 folletos políticos.

Solo espero que mi querida UTN - FRA, de la cual soy egresado reciente, no se convierta en esto mismo.

Saludos.